Mañana será el primer día de un nuevo curso escolar. De nuevo conocer un espacio, un aula, unos compañeros, unos niños y niñas...y no creo que esta noche pueda dormir bien, pues los nervios siempre consiguen vencer al sueño.
Adoro mi profesión, creo que no podría dedicarme a otra cosa y ser tan feliz como lo soy siendo maestra.
Se me hace muy dificil de explicar la gran vocación que siento, es fascinación lo que despiertan en mí esos "locos bajitos". Cada día pueden sorprenderte con una historia nueva, con una palabra o con un descubrimiento...tú formas parte de sus vidas, les ayudas a conocer y comprender el mundo que les rodea...Seguramente en un año ya no se acordarán de tí, pero tú siempre los llevas en tus recuerdos...por muchos coles que conozca, por muchos niños y niñas que pasen por mis aulas, siempre hay un espacio de mi memoria reservado para cada uno de ellos...
Es duro conocerles, cogerles cariño y despedirse de ellos en Junio...compartes sus risas, sus enfados, sus preocupaciones (que las tienen), sus ideas...compartes tu tiempo, les dedicas tu profesionalidad, pero también tu cariño...
Cada curso formas nuevos vínculos, el tiempo pasa despacio pero muy deprisa, parece que vas a estar allí siempre, pero derepente llega Junio y ellos se marchan...y tú te marchas sabiendo que no volverás a verles...
Aún así, siempre comienzas con ilusión, con ganas de disfrutar de esos pequeños que estás a punto de conocer...sabes que te enseñarán muchas cosas nuevas, pues siempre hay algo que aprender de ellos...siempre he pensado que son ellos los que me ayudan a mi en lugar de yo a ellos...Aportan mucho a mi vida, y espero poder aportar a sus vidas algo positivo.
Creo que la profesión de maestra es una de la más bonitas que existen...sólo con ver sus ojos al mirarte atentos mientras les cuentas un cuento, al recibir un abrazo por felicitarles al conseguir un nuevo logro...sólo con oir sus risas tu día puede convertirse en un gran día.
Espero estar bien en este cole, tan bien como lo he estado en los anteriores....y como siempre, echaré de menos a los compañeros y compañeras que he dejado atrás...y como siempre, seguiré haciendo hueco en mi memoria a los niños y niñas que formaron parte de mi vida, y a esos que están por llegar.
Me encanta ser maestra...